En ese sentido, Juan Carlos Chagas reconoció que “en 30 años no se pudo, o no se quiso llevar adelante una obra con la que otra sería la realidad de la sequía para la región”. El actual gobierno nacional dio el visto bueno para avanzar en un proyecto que la provincia pretende ampliar.
 
En un contexto donde el campo ruega por lluvia y exige medidas paliativas al estado por una sequía histórica, la región debería desempolvar las viejas consignas del convenio de Salto Grande de 1946, aquel que establecía las bases para aprovechar los rápidos del río Uruguay y construir un embalse que permitiera, como cuarto objetivo, un sistema de riego para toda la zona de influencia.
El todavía vicepresidente de la Delegación Argentina de la CTM reconoció a Diario Río Uruguay que “en 30 y picos de años de funcionamiento de Salto Grande, no se pudo o no se quiso llevar adelante una obra, que de haberse concretado, otra sería la realidad con el tema de la sequía”.

Allí remarcó que “en algún momento hay que dar el primer paso y nosotros lo vamos a dar, en total sintonía con la provincia”, desde donde se anunció un proyecto que llevaría agua para los productores agropecuarios del norte y centro de la provincia de Entre Ríos.

Chagas aclaró que era necesario ser “muy cautos a la hora de los anuncios, por que sino la opinión pública, en todo su derecho, nos demanda acciones concretas”. Pero insistió con que “nosotros vamos a dar los primeros pasos de un proyecta que ya está”. Explicando que “lo que hay que trabajar denodadamente es en una forma definitiva de la iniciativa, presentarlo ante las autoridades nacionales y luego buscar créditos internacionales”. Asegurando que la próxima administración trabajará “defendiendo la producción de nuestros hombres de campo y ofreciéndoles todas las herramientas que marquen una diferencia cualitativa a la región”.