El HLB se puede propagar al injertar tejido de una planta infectada en otra planta, pero es más probable que se transporte de un lugar a otro por psílidos infectados. Una vez que el psílido asiático de los cítricos tiene la enfermedad, la portará por el resto de su vida, (de semanas a meses), pasándola de un árbol a otro cuando se alimenta. Portalfruticola.com conversó con Gloria Pérez, gerente técnico de AFINOA (Asociación Fitosanitaria del Noa), quien explicó la situación de la enfermedad en Misiones.

En la provincia de Misiones, al norte de Argentina, desde el año 2012 en que se encontró una planta domiciliaria infectada en la localidad de Andresito, Departamento de General Belgrano, la alerta de propagación está latente.

Posteriormente, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, SENASA, encontró otras plantas positivas en Colonia Aurora y 25 de Mayo y el año pasado en Wanda, Departamento de Iguazú, todas en la provincia de Misiones.

Oficialmente SENASA ha reportado el hallazgo de 105 plantas positivas al HLB. Cabe destacar que, según las normativas internacionales, no se declara oficialmente la enfermedad ya que se ha conseguido erradicar.

“La zonas mencionadas están en área de contingencia y desde ahí, la fruta que salga para su comercialización, debe cumplir con la Res 165/13 de SENASA y la Disposición N° 2/16 que establecen que la fruta debe estar lavada y cepillada con proceso de empaque para evitar la contaminación a través de material infectado o presencia del insecto vector que es Diaphorina citri”, indicó Pérez.

Señaló que este cumplimiento debe ser efectivo para la protección de las plantaciones cítricas incluso estando libres de HLB.

Añadió que la información de las plantas positivas a HLB es oficial de 2015, y que a pesar de que no se han detectado más casos, no quiere decir que no haya.

“Recién en abril reanudarán las tareas intensivas que son las que son efectivas en estos casos”, concluyó la ingeniera.

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