Un agricultor por año producía entre 50 a 80 millares de cítricos, sin embargo ahora su producción se ha disminuido de 8 a 10 millares a causa de esta plaga.

“Lamentablemente las autoridades del nivel regional y central no dicen nada, a pesar que hemos remitido todos los documentos y solicitudes para que nos ayuden”, agregó el burgomaestre, tras informar que se realizó las coordinaciones con el Servicio Nacional de Sanidad Agraria de Lima y Puno, pero sin ninguna respuesta.

Cabrera refirió que no hay ningún plan en ejecución para el control de dicha plaga en la zona, a pesar de haberse ejecutado el Proyecto Regional Frutales, la misma que finalizó y actualmente está en liquidación.

“Nosotros queríamos que este proyecto se ampliara hasta diciembre; sin embargo, desde el Gobierno regional la respuesta es negativa”, indicó.

De la misma forma, recordó que actualmente no hay ningún proyecto de inversión público orientado al fortalecimiento de la producción frutícola en la región de Puno.

“Como Gobierno local somos los únicos en destinar y sacrificar nuestros recursos, a fin de atender el problema agrario y frutícola de la zona”, sentenció Cabrera.

Mil afectados
En el distrito de San Juan del Oro existen alrededor de mil agricultores, los mismos que se dedican a la producción de cítricos, café, cacao y otros.

Los productos como la naranja, mandarina, plátano, piña, granadilla, entre otros, son comercializados a los mercados de la región de Puno, principalmente a las ciudades de Puno y Juliaca.

La mosca de la fruta y la roya amarilla son los dos grandes problemas que tienen que afrontar los agricultores de esta localidad selvática puneña. La última ataca a los granos de café.

En octubre del 2014, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) declaró en estado de emergencia las zonas cafetaleras por 60 días debido a la plaga de la roya amarilla. Pese a ello persiste el inconveniente en Sandia.


Fuente: larepublica.pe