Con lo anterior se levantaron también las restricciones impuestas en el área cuarentenada de la ciudad.

La Directora Regional del SAG Tarapacá, Roxana Galleguillo, destacó el arduo trabajo realizado por los funcionarios del servicio fitosanitario tras las primera captura el 28 de enero.

“Pese a que nuestra región no produce fruta de exportación, estamos conscientes de las graves consecuencias económicas que esta plaga genera en el sector agrícola, lo que nos llevó a realizar un trabajo muy serio y acucioso de control, hasta lograr la erradicación”, dijo.

Cabe recordar que la captura de un macho de mosca del Mediterráneo (Ceratitis capitata) en una trampa del sistema de vigilancia habitual que mantiene el SAG en Iquique, activó un plan de vigilancia intensivo aumentando la densidad de trampas alrededor del área de detección.

El 3 de marzo se capturó una hembra no inseminada, con lo cual el SAG puso en marcha en forma inmediata el ‘Plan de Acciones Correctivas’ con el fin de erradicar el brote en la ciudad nortina, levantando un área de cuarentena de 7,2 kms. de radio alrededor de cada captura.

Con ello se detectaron 5 moscas más de la misma especie, la última el 25 de marzo, lo que intensificó las tareas de muestreo, tratamiento de suelo, instalación de trampas, descarga de fruta y difusión, con el objetivo de erradicar la plaga.

“Lo positivo es que no hubo focos larvarios, es decir, al analizar fruta que se descargaba de árboles de los jardines de las casas o calles de Iquique y analizarla, no se encontraron larvas de mosca del Mediterráneo; lo cual nos permite afirmar que las detecciones fueron muy tempranas, evitando que el insecto comenzara a reproducirse con el fin de generar una segunda generación de mosca de la fruta aquí”, dijo Galleguillo.

El SAG informó que una vez realizado el estudio del ADN de los ejemplares capturados para determinar su origen, se pudo establecer que ingresaron al país en fruta larvada desde Argentina, Perú, Bolivia, Uruguay, Paraguay o Brasil.

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