El titular de la entidad que nuclea a las asociaciones citrícolas de Chajarí, Federación, Villa del Rosario y Concordia, reconoció que “es un desafío muy importante conducir los destinos de la FeCiER por tercer año consecutivo”, pero a renglón seguido destacó que se siente “respaldado y acompañado por todos los dirigentes de las cuatro asociaciones que conforman la Federación del Citrus de Entre Ríos”. En cuanto al perfil que le imprimirá a su tercer mandato, Mover anticipó que “como ha sido mi proceder en los períodos anteriores, seguiré consensuando todos mis actos. Mi principal objetivo es seguir trabajando para que el sector citrícola se convierta en una gran familia, pensando en que la citricultura es una sola”, afirmó. A ese respecto, estimó que “vamos por la buena senda porque las entidades que integran la FeCiER se han manifestado en cada gestión apoyando y trabajando juntas, y si seguimos de esa manera nos haremos casa día más fuertes a la hora de llevar adelante nuestros reclamos, y así debe ser ya que las necesidades del sector son cada vez más grandes”, consideró. Mover recordó que en los períodos anteriores “hemos tenido que afrontar varios frentes para llevar adelante gestiones diversas, surgidas por las inclemencias climáticas, controles en fruta con destino a mercado interno y fiscalizaciones laborales”, y también “hemos mantenido innumerables reuniones con representantes de los poderes Ejecutivo y Legislativo de la Nación y la Provincia para llevarles, con mucha seriedad, los planteos del sector citrícola”, refirió. Y si bien reconoció que “los reclamos han sido atendidos y también acompañados ante las autoridades nacionales por parte del gobierno entrerriano”, arriesgó que “en esta tercera gestión deberemos incrementar el esfuerzo para resolver cada uno de los problemas que surjan, que es nuestra responsabilidad, en pos del bienestar de los productores y sus respectivas familias”, resaltó. En cuanto a sus asignaturas pendientes, Néstor Mover ponderó como de vital importancia “continuar trabajando en pos de alcanzar dos objetivos centrales, largamente anhelados, que aún están en el debe: la introducción de modificaciones a las leyes laborales actuales para facilitar las condiciones de contratación y baja de personal; y la creación de un Fondo Nacional Citrícola”, finalizó.