La región de Valencia es la zona citrícola tradicional más importante, pero hace más de diez años Andalucía comenzó a cobrar importancia también, pues es excelente para cultivar variedades muy tempranas y tardías.

"Visitamos Huelva, que es ideal para las naranjas tempranas. En particular en Isla Cristina, se cultivan las clementinas más tempranas de todo el Mediterráneo. Estos territorios son ideales también para las variedades tardías porque no existe riesgo de heladas".

"Tenemos que comprender lo que ocurre a nuestro alrededor, lo que hacen los demás y compartir los conocimientos. Yo creo que es importante que los técnicos estén en contacto en los institutos de investigación y las universidades, pero es igual de fundamental compararse con otros países.

"España es nuestro principal competidor y, probablemente, ahora sea el país más activo desde el punto de vista agrícola. Italia se considera de innovación moderada, por lo que tenemos que experimentar más. Por desgracia, la formación todavía se encuentra con algunos límites, pues los técnicos tienen que viajar más".

Avances recientes en la citricultura española
La producción global de naranjas se ha duplicado en los últimos siete u ocho años, por lo que los españoles han apuntado a las mandarinas, que están disponibles entre mediados de febrero y abril, y se han centrado en las variedades Nadorcott (o Afourer), Orri y Mor.
Estas variedades garantizan altos beneficios, pero han entrado en el registro español de variedades protegidas durante un periodo de treinta años, por lo que se necesita autorización para cultivarlas.

Perri explica que "estas variedades deben polinizarse lejos de otras, pues la polinización cruzada genera muchas pepitas. Giuseppe Russo, investigador del Istituto Sperimentale per l'Agrumicoltura, también participó en la visita y los dos conocimos a muchos técnicos e investigadores cualificados del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA)".

Entre las tareas del IVIA se encuentra la prueba DHE: "Una vez se ha creado una nueva variedad, se somete el examen técnico de identificación varietal que verifica que sea distinguible, homogéneo y estable. Estos son los parámetros para establecer si puede incluirse en el registro de variedades protegidas".

La importancia de los portainjertos
"Dado que cada vez hay más variedades, los técnicos deben saber cuáles son los portainjertos más adecuados, pues pueden influir en varios aspectos como el rendimiento, la maduración, la calidad, el calibre, el desarrollo del árbol y la absorción de minerales".

En Italia, se usaba casi exclusivamente el Arancio Amaro, pero la situación cambió tras los problemas causados por el virus de la tristeza (CTV). "Actualmente, las alternativas son Citrange Troyer, Carrizo, C35, Citrumelo Swingle y Poncirus. Sin embargo, algunos de estos solo pueden usarse en suelos pobres en cal".

Algunas selecciones que se están teniendo en cuenta actualmente son:
- C 22 (Bitters), seleccionado en California, reduce el follaje y es tolerante al virus de la tristeza y a los suelos calcáreos;
- F&A5, seleccionado en España por el IVIA, tolerante a la tristeza y a los suelos calcáreos;
- 68-IG-26-F6-P12, creado por el Istituto Sperimentale per l'Agrumicoltura (ISA), ahora CRA-ACM. Resulta interesante porque fomenta la productividad, es similar al Citrumelo y es tolerante a la tristeza y a los suelos calcáreos.

El papel de la investigación científica
"La cooperación con los institutos de investigación es esencial. Yo, personalmente, aprecio todo el trabajo que el CRA ha hecho para desarrollar y renovar el cultivo de cítricos y espero que haya nuevos investigadores dispuestos a ayudar".

"Especial mención merece Angelo Starrantino, gracias a quien comencé a colaborar con el ISA. No podemos innovar y cultivar solos, necesitamos de la ciencia y la investigación".

"Especial mención merece Angelo Starrantino, gracias a quien comencé a colaborar con el ISA. No podemos innovar y cultivar solos, necesitamos de la ciencia y la investigación".