Dicho acuerdo, según sus palabras, sería la alternativa para combatir el empleo en negro en el sector.

Sin embargo, pese a la “promesa” del Ministro de Trabajo Carlos Tomada, aún “no tenemos respuestas”, enfatizó Mover. La mencionada normativa para la producción citrícola “no sirve”, por los costos que le originan al productor que requiere de mano de obra “intensiva”. 

“Venimos trabajando desde hace mucho tiempo, tratando de cambiar esta situación a través de la modificación del sistema laboral, para que sea acorde a nuestro sector y para que no continuemos con este enfrentamiento, pero aún no tenemos respuestas del Ministerio de Trabajo”, relató el dirigente.

“Hace dos años presentamos un proyecto. Y hace dos meses tuvimos un encuentro con Tomada del que también participó el gobernador, algunos legisladores y el secretario de la Producción. En esa oportunidad, el mismo Tomada se comprometió a convocarnos para sentarnos a verlo, pero estamos esperando todavía”, reiteró.

Puntualmente, los cambios propuestos por FECIER tienen que ver con la elaboración de un sistema de regularización de trabajadores que sea específico para el sector citrícola. La ley de Convenios de Corresponsabilidad Gremial establece la firma de acuerdos entre entidades gremiales representativas de trabajadores rurales y empresarios, con el fin de reemplazar el pago mensual de aportes y contribuciones destinados al Sistema de Seguridad Social, por un pago único que se realiza en el momento de la venta de la producción.

Este sistema según dijo, “no nos sirve porque nosotros facturamos todas las semanas o todos los días; sí le sirve al trigo o al maíz por ejemplo que tienen temporadas más largas o una vez al año, adonde le retienen de la facturación un porcentaje y eso va a un fondo desde el cual se le distribuye a todo lo que es la parte social de los empleados”.

Pero para el caso del citrus “la actividad demanda otro tipo de trabajo, es decir, dos meses en un lugar, una semana en otra parte y 15 días en otro lado porque la cosecha es intensiva y se requieren muchos trabajadores”, apuntó Mover que para graficar agregó: “Imaginemos que hay que contratar 10 hombres por una semana”.

En tal sentido “queremos un sistema para que el trabajador se acerque a las fincas, que diga ‘yo quiero trabajar’ y que tenga una tarjeta y que se le deposite ahí. No queremos precarizar, queremos algo acorde. Estamos intentando acercar posturas pero al parecer no hay ánimos para solucionarlo y de lo contrario no sé cuál es la intención”, remarcó el dirigente. En tanto, “hasta que no se modifique la ley, todo el mundo puede hacer inspecciones”, indicó. Sin embargo “con la crisis presente no es el mejor momento, pero tampoco nos dan la posibilidad de discutir algo que nos sirva a las dos partes”, concluyó el titular de Federación del Citrus.
 
Fuente: Diario Rio Uruguay