El experto explica que, además de los documentos que certifiquen el origen de los productos, también se solicitan certificados de calidad.

"Todos los productos vegetales deben estar tratados y protegidos contra plagas y enfermedades. Es importante que estos procesos se hayan llevado a cabo de forma adecuada. Para la fruta que ya está disponible comercialmente, la NVS requerirá el cumplimiento de los protocolos referentes a límites máximos de residuos. Si se sospecha de incumplimiento, la Agencia realizará inspecciones", añade el especialista.

Como ejemplo, cita el caso de un gran envío de naranjas de Turquía el cual se sospechaba que había sido sometido a un tratamiento poscosecha con tres tipos de conservantes. Tras la inspección, quedó patente que los resultados fueron correctos y, por consiguiente, la fruta fue autorizada para su venta.


Fuente: investor.bg