Los exportadores sudafricanos de cítricos, que lo han tenido especialmente difícil para enviar sus productos a Europa, han tenido que buscar otros mercados para compensar.

“Los productores sudafricanos de cítricos opinan que las medidas tienen que ver más con el proteccionismo del mercado”, señala Andreas Schindler, de Don Limon. “Opinan que hay un grupo de presión español que está promoviendo la imposición de barreras de entrada que dificultan que los exportadores de otros continentes, en especial los sudafricanos, accedan al mercado europeo”. Dadas las dificultades en Europa, Schindler explica que es mejor que los productores sudafricanos se planteen enviar sus productos a otros continentes.

“Europa sigue siendo un mercado grande para Sudáfrica” apunta, “pero nos satisface desarrollar mercados en Asia”. Don Limon, con sede en Alemania y con oficinas en Sudáfrica, China y Latinoamérica, trabaja con citricultores de todo el mundo para comercializar su fruta. Schindler subraya que, aunque Asia, y China, en particular, es un destino atractivo para los productores, abrirse camino en ese mercado requiere de los contactos adecuados.

“Podemos llegar a los consumidores en China continental que no hablan inglés”, dice. “Antes, las grandes compañías comercializadoras trabajaban con otras grandes compañías en China y vendían las unas a las otras, y luego la compañía china le vendía a alguien más y así sucesivamente. Lo que se puede hacer por el exportador y el comprador es conseguir que el proceso sea más directo. En lugar de comprarle al cliente de un cliente de un cliente, nos compran a nosotros”. Con tanto potencial como hay en Sudáfrica, Schindler dice que tiene sentido desarrollar nuevos mercados.

“Vemos tanto potencial en Sudáfrica que tenemos pensado duplicar nuestros volúmenes de cítricos a partir de ahí”, añade. “Estamos desarrollando mercados para encontrarle destino a toda la fruta que haya en el árbol”.