No se tiene la cantidad precisa de hectáreas ya destruidas, pero se teme que el impacto sea muy fuerte en este rubro. Los labriegos manifestaron su preocupación por las pérdidas económicas.

Cultivo de naranja de la propiedad de Juan Escobar, ubicada en Edelira. Tuvo que ser destruido ante la presencia de la enfermedad de Huanglongbing o HLB en las plantas.
Cultivo de naranja de la propiedad de Juan Escobar, ubicada en Edelira. Tuvo que ser destruido ante la presencia de la enfermedad de Huanglongbing o HLB en las plantas. / ABC Color
ENCARNACIÓN (De nuestra redacción regional). Uno de los productores que ya tomó la drástica y única medida posible es Juan Escobar, del distrito de Edelira, ubicado a poco más de 100 kilómetros al noreste de esta capital departamental. Al menos cinco hectáreas de naranja tuvieron que ser removidos ante el ataque de la enfermedad, que destruye la planta y termina secándola por completo.

Respecto de la situación, el secretario de Medio Ambiente de la Gobernación de Itapúa, Ing. Antonio Fariña, recomendó a los productores verificar la presencia de la enfermedad antes de la destrucción del cultivo. El técnico confirmó que el daño está bastante extendido, sobretodo el la zona noreste del departamento, como Mayor Otaño, Carlos Antonio López, San Rafael del Paraná y Edelira, y más al norte hacia el distrito de San Pedro del Paraná.

“A medida que se van detectando los focos se van destruyendo las plantas”, dijo Fariña y agregó que la única solución ante la aparición de la enfermedad en la planta es su destrucción.

“Todavía no hay datos de superficie afectada, pero creemos que aún no se dio una afectación masiva. El Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y Semilla (Senave) está trabajando fuertemente para eliminar los focos de infección”, refirió.

Se estima que en Itapúa existen unas 15.000 hectáreas de cítricos, en su mayoría en el sector noreste del departamento, donde el clima frío y la tierra son muy aptos para este rubro.

El Huanglongbing (HLB), también conocido como enverdecimiento de los cítricos, es una enfermedad bacteriana de las plantas que, aunque no es peligrosa para los humanos, destruye la producción, la apariencia y valor económico de los árboles de cítricos. El sabor de la fruta y su jugo se vuelven amargos.

Es la enfermedad más destructiva de las plantas de cítricos y una vez que un árbol está infectado no tiene cura. Los árboles infectados tienen frutos incomibles, deformes y, con el tiempo, mueren.

El HLB tiene como hospedero a una pequeña cigarra (ñakyrã, en guaraní). “Una de las formas de evitar la propagación del vector es combatir la cigarrita y eliminar las plantas donde se alojan”, explicó Fariña.

Prohibición

Por lo pronto, y con el objetivo de evitar una mayor propagación de la enfermedad, está totalmente prohibido el transporte de plantas de cítricos. Se están controlando los viveros para eliminar los focos donde se detecta la presencia del mal.

Advirtieron hace cinco años

El Ing. Agr. Nelson Lezcano, del Centro de Investigación Agrícola de Capitán Miranda (ex-CRIA), señaló que hace cinco años las autoridades del Senave fueron advertidas del peligro de la aparición de esta enfermedad, proveniente del Brasil. En ese entonces “no le prestaron atención ni le dieron importancia” al tema, y este es el resultado.

“Prácticamente no existe un distrito en la República donde no exista la enfermedad”, sostuvo.