En diálogo con esta Agencia, Calgaro expresó: “estamos con una primavera un tanto complicada, por el exceso de lluvia, que hace que muchas enfermedades provocadas por los hongos afecten a la fruta nueva”.

No obstante, aclaró que “esos son los riesgos del campo y los desafíos de los productores cuando apostamos a estas actividades”. Las quintas que sobrevivieron, “se recuperan de las heladas intensas y las que no ya tienen destino de cambio”, explicó a AIM.

En tanto, “los productores que recibieron los aportes no reintegrables están destinados para compras de insumos y adquirieron funguicidas para paliar la primavera complicada”. Además, “dentro del marco de la emergencia, estamos esperando los créditos blandos que se habían anunciado del banco nación, pero aún no hay novedades”.

Calgaro indicó a AIM que “todavía no se sabe la producción que habrá para el año que viene, pero estimamos que la merma será importante, dado que las plantas fueron dañadas por las heladas y las precipitaciones, con un porcentaje mayor que no floreció y si lo hizo, abortó la fruta, parte de un proceso natural que hace el árbol para recuperarse”.

En ese sentido, señaló que aproximadamente en un mes, “tendremos definida la producción del año próximo”.

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