Este año el Congreso Latinoamericano de Jugos, “Juice Latin America”, se realizó a principios de julio en Santiago de Chile. El año pasado la sede fue Buenos Aires.

El Congreso cobra relevancia dentro del mundo de las frutas y los jugos por la gran incidencia de Latinoamérica en esta industria. Brasil es el primer productor de jugo de naranja. Argentina es el primer productor del de limón y uno de los principales productores de jugos de manzana y de uva. Chile tiene menor incidencia en la industrialización, dado que está enfocado a la exportación de fruta fresca. Excepción a esto es la producción de purés de manzanas y jugos y congelados de berries, casos en los que Chile si tiene un rol preponderante a nivel mundial.

Las presentaciones se dividieron en dos grandes grupos:
* La situación de la producción de jugos de diferentes especies.
* La situación actual de las bebidas no alcohólicas en diferentes países o regiones
Aquí se detallan los temas más interesantes para el sector frutícola argentino.

Situación del jugo de limón

Con el 65% del comercio mundial de jugo de limón, Argentina es por lejos el principal productor y proveedor mundial. Le siguen: España, con una participación del 19%; Italia, con el 12% y Sudáfrica con el 4%. Aunque Estados Unidos es también un gran productor que muele el 20% de la producción mundial, destina su producción al mercado interno. Es más, su producción no alcanza para cubrir su demanda, por lo que compra al exterior importantes volúmenes.

Durante el congreso se expuso la situación de España, que en los últimos años experimentó marcadas variaciones productivas. Ello se debió a su dependencia: de la evolución del mercado del limón fresco en la Unión Europea, que es el principal objetivo de la citricultura española; de la magnitud de su cosecha y de la evolución de la industria argentina. Dado que en los últimos tres años Argentina tuvo una menor cosecha debido a problemas climáticos, la situación del jugo de limón se presentó muy favorable y llevó a que España moliera mayores volúmenes. Esto podría revertirse si Argentina vuelve a una producción normal.
Una alternativa interesante que se presenta a los españoles es la producción orgánica. Aunque actualmente solo representa el 15% del negocio total, es un mercado muy interesante, pagándose precios bastante más atractivos que para el jugo convencional.

Situación del jugo de naranja

El negocio del jugo de naranja está principalmente en manos de Brasil y Estados Unidos. Al igual que en limón, Estados Unidos es un importante productor de jugo de naranja, pero lo consume internamente, por lo también importa. Brasil, aunque también consume mucho localmente, tiene una producción menor, pero es el principal exportador mundial. Su principal mercado es Europa que compra el 40% del jugo FCOJ y el 80% del NFC. Otros destinos importantes del jugo brasileño son Estados Unidos (reciben 16% del FCOJ y 19% del NFC) y Asia (29% FCOJ).

En los últimos años la citricultura brasileña vivió cambios muy importantes, causados en gran parte por problemas fitosanitarios. Entre las múltiples enfermedades y plagas que se están dando en Brasil, son cuatro las más dañinas: CVC (clorosis variegada), cancro cítrico, greening y muerte súbita. Estas enfermedades causaron la erradicación de 43,4 millones de árboles en los últimos 10 años. Esta cantidad representó el 25% de los árboles del estado de San Pablo, principal productor de naranjas del país, y llevó a una reducción similar de la superficie plantada. Junto con la superficie se redujo también la producción, aunque esta fue en parte compensada por un marcado incremento de los rendimientos. En 20 años se pasó de una producción de 15 ton/ha a 26 ton/ha. Debido a los problemas productivos y el incremento de costos, la industria citrícola sufrió una fuerte concentración. Muchos productores se volcaron hacia otras producciones menos riesgosas y más rentables.

Los problemas que surgieron en Brasil como las enfermedades, reducción de superficie y producción, también se dieron en Florida (Estados Unidos), que es el otro gran polo productor de naranjas y de jugo. Entre los problemas que prevalecieron en Florida se cuentan: las enfermedades (cancrosis, greening), los huracanes y la presión poblacional. Esto llevó a una reducción del 33% de la superficie en los últimos 10 años.

La disminución de producción a nivel mundial, llevó a fuerte incremento de los precios. Esto fue especialmente marcado en la campaña anterior, cuando la cosecha brasileña sufrió una merma considerable. Para la actual campaña se espera una recuperación, con un incremento del 32% de la producción de naranjas en Brasil.

Fuente:fruticulturasur.com